Se ha encontrado una aterradora nueva especie de araña venenosa que pudre la carne humana con una sola picadura y se esconde en los muebles.
La bestia envenenadora fue descubierta por científicos en México que bautizaron a la araña como Loxosceles Tenochtitlan.
Aunque no son mortales, las arañas Loxoceles son conocidas por tener un potente veneno que destruye los tejidos y puede causar lesiones de necrosis en la piel de hasta 40cm.
Esto tarda varios meses en curarse y al final deja una cicatriz permanente.
La picadura puede ser incluso más peligrosa cuando se trata de niños, ya que puede acabar siendo transportada por el torrente sanguíneo provocando la destrucción de los glóbulos rojos.
Descubrimiento pionero
La araña violinista, también conocida como araña reclusa, fue confundida en un principio con la Loxosceles misteca, otra especie originaria de los estados mexicanos de Guerrero y Morelos pero introducida en el Valle de México.
Según los investigadores, la araña fue descubierta por el biólogo y profesor universitario Alejandro Valdez-Mondragón junto con sus alumnas Claudia Navarro, Karen Solís, Mayra Cortez y Alma Juárez.
La nueva especie fue descubierta por científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Alejandro dijo a medios locales: «Como es muy parecida a la Loxosceles misteca pensamos que había sido introducida a esta región por el envío de plantas de ornato, pero al hacer estudios de biología molecular de ambas especies, nos dimos cuenta de que son completamente diferentes».
El científico también advirtió que esta especie venenosa puede picar a los humanos si se sienten atacados.
¿Qué son las arañas Loxosceles Tenochtitlan?
Las arañas Loxoceles son conocidas por tener un potente veneno que destruye los tejidos y puede causar lesiones de necrosis en la piel de hasta 40 cm.
Esta especie venenosa puede morder a los humanos si se sienten atacados.
Suelen esconderse en agujeros entre objetos, muebles o en las paredes.
Las arañas se sienten atraídas por la basura ya que pueden alimentarse de los insectos que la rodean y se sabe que las hembras son el doble de venenosas que los machos.
Suelen esconderse en agujeros entre objetos, muebles o en las paredes.
Añadió: «Les proporcionamos la temperatura, la humedad y el alimento para que se establezcan en nuestras casas, lo que nos pone en riesgo de tener un accidente con ellas, aunque también cumplen una importante función ecológica al alimentarse de insectos.»
Las arañas se sienten atraídas por la basura ya que pueden alimentarse de los insectos que la rodean y se sabe que las hembras’ son dos veces más venenosas que los machos.
México es el país con mayor diversidad del género Loxosceles ya que 40 de las 140 especies que existen en el mundo son nativas del país.
El año pasado se descubrió en Myanmar una nueva especie de arácnido que parece una araña con cola.
Se estima que el bicho de ocho patas se desplazó por el suelo de los bosques hace 100 millones de años.
Los científicos encontraron la criatura atrapada en un trozo de ámbar de mediados del período Cretácico, y ahora creen que es una especie completamente nueva.
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