Descripción: El cuerpo del siluro de nariz de pala manchada se confunde a menudo con el de otros siluros cuando son jóvenes. La parte superior de su cuerpo liso y pardo está cubierta de barras verticales e hileras de «manchas» negras que se hacen más grandes y circulares a medida que envejecen. Este siluro «bigotudo» tiene una cabeza en forma de pala con ojos pequeños y barbillas largas.
Tamaño: Pueden alcanzar una longitud de 166 cm y pesar más de 100 kg.
Comportamiento: Los siluros son peces territoriales y agresivos con los peces más pequeños. Siempre están al acecho en las aguas turbias en busca de presas.
Dieta: Estos alimentadores oportunistas son cazadores nocturnos y se alimentan principalmente de peces, pero también comen crustáceos.
Sentidos: Los siluros moteados dependen de la quimiorrecepción (respuesta a los estímulos químicos -sustancias disueltas en el agua- utilizando principalmente los sentidos del gusto y el olfato) para encontrar presas, evitar a los depredadores, coordinar el momento del desove y localizar a los peces de su propia especie. Todo su cuerpo está cubierto de diminutas papilas gustativas que les permiten «saborear» las aguas que les rodean. Cerca de sus fosas nasales se encuentran unas sensibles fosas olfativas que les permiten detectar el alimento a larga distancia y también localizar a sus presas en aguas con visibilidad limitada. Sus barbillas actúan como antenas y antenas.
Comunicación: Producen diferentes tipos de sonidos utilizando sus músculos sónicos. Tienen
una recepción auditiva bien desarrollada que discrimina entre diferentes tonos y velocidades.
Reproducción: La migración de estos peces está ligada a las inundaciones, durante las cuales tiene lugar la época de desove. Las hembras liberan sus huevos cerca de la superficie del agua; un macho o varios machos nadarán por encima de ellos liberando el esperma para la fertilización. No hay cuidados parentales una vez que los huevos se han dispersado.
Hábitat/área de distribución: Estos bagres son nativos de las aguas turbias de las cuencas fluviales de toda Sudamérica, como el Amazonas y el Orinoco.
Estado: No evaluado por la Lista Roja de la UICN.