Lo que pasa con los enamoramientos es que tienen el poder de literalmente aplastarte. Si tu enamorado no te corresponde con los mismos sentimientos difusos de más de un amigo, puedes sentirte como si el pozo en tu estómago nunca se fuera a ir. Es especialmente desagradable cuando ves que el objeto de tu afecto publica en las redes sociales sobre otra persona. Es posible que tengas ganas de vomitar y que sientas que te invade un sentimiento de shock, pero durante esos momentos de decepción masiva, es importante recordar lo siguiente.
1. Los sentimientos no duran para siempre. Los sentimientos no duran para siempre. Es difícil imaginar que no te sientas así de mal y atrapado en lo que y en quien tu enamorado está centrando toda su atención, pero como todas las cosas en la vida, esto también pasará. Sólo mantente centrado en tu propia vida y un día te despertarás y no te importará en absoluto lo que tu (ahora ex) enamorado está haciendo.
2. A tu mente y emociones les encanta elevar las cosas. No tienes ni idea de lo que realmente está pasando entre tu enamorado y esta otra persona. Esto le da a tu mente un montón de espacio para crear cualquier escenario que quiera y por lo general no es ni siquiera cerca de la realidad. La próxima vez que te sorprendas a ti mismo haciendo esto, recuérdate a ti mismo que no importa cuál sea la situación, no tiene nada que ver contigo, y que tu tiempo está mejor invertido en hacer algo que te haga sentir bien.
3. Centrar tu atención en tu enamorado y en su vida amorosa actual sólo te impide conocer a alguien nuevo. Hay mucha gente en este mundo, una persona no debería ser la barrera entre tú y alguien que te dará toda la atención y los buenos sentimientos de enamoramiento que actualmente anhelas.
4. Lo que tiene que ser, será. Si tú y tu enamorado debéis acabar juntos, lo haréis. Lo único molesto de esto, es que vendrán cuando ya lo hayas superado y hayas pasado página.
5. Pregúntate por qué estás flipando tanto con esa persona. A veces es necesario parar y darse un repaso a la realidad de por qué estás tan metido en esta persona. Puede que te des cuenta de que has olvidado por qué te gusta esta persona y tu «enamoramiento» se ha convertido en un mal hábito. Ten una conversación seria con tu corazón y lo más probable es que te sientas mucho mejor después.