El Día Mundial del Retrete, el 19 de noviembre, celebra los retretes y sensibiliza sobre los 4.200 millones de personas que viven sin acceso a un saneamiento gestionado de forma segura. Se trata de tomar medidas para hacer frente a la crisis mundial de saneamiento y lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6: agua y saneamiento para todos para 203029>
Este año el Día Mundial del Retrete 2020 se centra en el saneamiento sostenible y el cambio climático. El cambio climático está empeorando. Las inundaciones, las sequías y la subida del nivel del mar amenazan los sistemas de saneamiento, desde los retretes hasta las fosas sépticas y las plantas de tratamiento. Todo el mundo debe tener un saneamiento sostenible, junto con agua limpia e instalaciones para lavarse las manos, para ayudar a proteger y mantener nuestra seguridad sanitaria y detener la propagación de enfermedades infecciosas mortales como el COVID-19, el cólera y la fiebre tifoidea. Los sistemas de saneamiento sostenible también reutilizan los residuos para impulsar la agricultura de forma segura, y reducen y capturan las emisiones para obtener una energía más verde.
Entonces, ¿cómo es un sistema de saneamiento sostenible? El saneamiento sostenible comienza con un retrete que captura eficazmente los residuos humanos en un entorno seguro, accesible y digno. Los residuos se almacenan en un depósito, que puede ser vaciado posteriormente por un servicio de recogida, o transportado por tuberías. La siguiente etapa es el tratamiento y la eliminación segura. La reutilización segura de los residuos humanos ayuda a ahorrar agua, reduce y captura las emisiones de gases de efecto invernadero para la producción de energía, y puede proporcionar a la agricultura una fuente fiable de agua y nutrientes.
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