Desarrollo de la vida

Más allá del pensamiento operacional formal: Pensamiento postformal

Figura 1. A medida que los adultos jóvenes adquieren más experiencia, piensan cada vez más en abstracto y son capaces de comprender diferentes perspectivas y complejidades.

En el módulo de la adolescencia, analizamos el pensamiento operacional formal de Piaget. El sello de este tipo de pensamiento es la capacidad de pensar de forma abstracta o de considerar posibilidades e ideas sobre circunstancias nunca experimentadas directamente. Sin embargo, el pensamiento abstracto es sólo una característica del pensamiento adulto. Si comparamos a un niño de 14 años con alguien de treinta y tantos, probablemente descubriremos que este último no sólo considera lo que es posible, sino también lo que es probable. ¿A qué se debe este cambio? El joven adulto ha adquirido experiencia y comprende por qué las posibilidades no siempre se convierten en realidades. Esta diferencia en el pensamiento del adulto y del adolescente puede provocar discusiones entre las generaciones.

He aquí un ejemplo. Una estudiante de casi 30 años relató una discusión de este tipo que tenía con su hijo de 14 años. El hijo había ahorrado una cantidad considerable de dinero y quería comprar un coche viejo y guardarlo en el garaje hasta que tuviera edad para conducir. Podría sentarse en él, fingir que conducía, limpiarlo y enseñárselo a sus amigos. Parecía una oportunidad perfecta. La madre, sin embargo, tenía objeciones prácticas. El coche se quedaría parado durante varios años mientras se deterioraba. El hijo probablemente cambiaría de opinión sobre el tipo de coche que quería cuando tuviera edad para conducir y se quedarían con un coche que no funcionaría. También le preocupaba que tener un coche cerca fuera demasiada tentación y que el hijo decidiera sacarlo a escondidas para dar una vuelta rápida antes de tener el permiso o la licencia.

La teoría del desarrollo cognitivo de Piaget terminaba con las operaciones formales, pero es posible que otras formas de pensar se desarrollen después (o «post») de las operaciones formales en la edad adulta (aunque este pensamiento no constituya una «etapa» separada del desarrollo). El pensamiento postformal es práctico, realista y más individualista, pero también se caracteriza por comprender las complejidades de varias perspectivas. A medida que una persona se acerca a los 30 años, lo más probable es que tome decisiones por necesidad o por experiencia previa y que esté menos influenciada por lo que piensen los demás. Por supuesto, esto es especialmente cierto en culturas individualistas como la de Estados Unidos. El pensamiento postformal suele describirse como más flexible, lógico, dispuesto a aceptar complejidades morales e intelectuales y dialéctico que las etapas anteriores del desarrollo.

El esquema de Perry

Una de las primeras teorías sobre el desarrollo cognitivo en la edad adulta temprana se originó con William Perry (1970), que estudió a estudiantes universitarios de la Universidad de Harvard. Perry observó que en el transcurso de los años universitarios de los estudiantes, la cognición tendía a pasar del dualismo (pensamiento absoluto, en blanco y negro, correcto e incorrecto) a la multiplicidad (reconocer que algunos problemas tienen solución y que algunas respuestas aún no se conocen) y al relativismo (comprender la importancia del contexto específico del conocimiento: todo es relativo a otros factores). Al igual que el pensamiento operativo formal de Piaget en la adolescencia, este cambio de pensamiento en la edad adulta temprana se ve afectado por las experiencias educativas.

Pensamiento dialéctico

Además de orientarse hacia consideraciones más prácticas, el pensamiento en la edad adulta temprana también puede volverse más flexible y equilibrado. Las ideas abstractas en las que el adolescente cree firmemente pueden convertirse en normas por las que el individuo evalúa la realidad. Como señaló la investigación de Perry, los adolescentes tienden a pensar en dicotomías o términos absolutos; las ideas son verdaderas o falsas; buenas o malas; correctas o incorrectas y no hay término medio. Sin embargo, con la educación y la experiencia, el joven adulto llega a reconocer que hay algo correcto y algo incorrecto en cada posición. Este tipo de pensamiento es más realista porque muy pocas posiciones, ideas, situaciones o personas son completamente correctas o incorrectas.

Algunos adultos pueden ir incluso más allá del pensamiento relativista o contextual descrito por Perry; pueden ser capaces de reunir aspectos importantes de dos puntos de vista o posiciones opuestas, sintetizarlos y llegar a nuevas ideas. Esto se denomina pensamiento dialéctico y se considera uno de los aspectos más avanzados del pensamiento postformal (Basseches, 1984). No existe una única teoría del pensamiento postformal; hay variaciones, con énfasis en la capacidad de los adultos para tolerar la ambigüedad o para aceptar contradicciones o encontrar nuevos problemas, en lugar de resolverlos, etc. (además del relativismo y el dialecticismo que acabamos de conocer). Lo que todos tienen en común es la propuesta de que la forma de pensar puede cambiar durante la edad adulta con la educación y la experiencia.

¡Contribuye!

Mejora esta páginaAprende más