Un drive-in es un establecimiento (como un restaurante o un cine) en el que se puede entrar con un automóvil para ser atendido. En un autocine, por ejemplo, los clientes aparcan sus vehículos y suelen ser atendidos por personal que sale a pie o en patines para tomar los pedidos y volver con la comida, animando a los comensales a permanecer aparcados mientras comen. Los autocines tienen una gran pantalla y una zona de aparcamiento para los espectadores.
Suele distinguirse de un drive-through, en el que los conductores se ponen en fila para hacer un pedido ante un micrófono colocado a la altura de la ventana, y luego se dirigen a una ventanilla donde pagan y reciben su comida. A continuación, los conductores se llevan la comida a otro lugar para comer. Sin embargo, durante los periodos de mayor afluencia, los clientes pueden tener que aparcar en un lugar designado para ello y esperar a que un empleado les sirva directamente la comida a pie hasta su coche, lo que hace que se perciba una relación entre los dos tipos de servicio. En el mundo de habla alemana, el término se utiliza ahora a menudo en lugar de «drive-through» para este tipo de servicio. En Japón, el término se refiere a un área de descanso. En Francia, este término se ha popularizado debido a las películas americanas que muestran ese tipo de servicio, y más recientemente debido a la expansión de los restaurantes de comida rápida.
El primer restaurante drive-in fue Kirby’s Pig Stand, que abrió en Dallas, Texas, en 1921. En Norteamérica, los autocines de todo tipo se han vuelto menos populares desde su apogeo en los años 50 y 60, y los drive-throughs han cobrado importancia desde los años 70 y 80.
El mayor autocine que sigue en funcionamiento es The Varsity de Atlanta, Georgia.