Arcaro también ganó ocho veces el Suburban Handicap, nueve veces el Wood Memorial Stakes y diez veces la Jockey Club Gold Cup.
En competición internacional, en el viejo hipódromo de Woodbine, en Toronto, Arcaro ganó el Queen’s Plate de 1953 (la carrera más prestigiosa de Canadá); en el hipódromo de Laurel Park, en Laurel, Maryland, ganó el Washington, D.C. International de 1954 contra los mejores caballos y jinetes de Europa.
En 1953 Arcaro recibió el premio George Woolf Memorial Jockey Award, y en 1958 fue incluido en el Museo Nacional de Carreras y en el Salón de la Fama de Saratoga Springs, Nueva York.
Activo en los asuntos de los jinetes, Arcaro fue una fuerza impulsora de la creación del Jockeys’ Guild. Se retiró en 1962, debido a una grave bursitis en el brazo. A lo largo de su carrera, Arcaro participó en 24.092 carreras y ganó 4.779, con unas ganancias récord de 30.039.543 dólares. Después de trabajar como comentarista televisivo de carreras para la CBS y la ABC, fue relaciones públicas del Casino Golden Nugget de Las Vegas antes de retirarse a Miami, Florida. También trabajó como portavoz de la división de motores Buick de General Motors, para la que pronunció la conocida frase «Si el precio de un Buick, comprarás un Buick». Durante muchos años fue propietario de un popular restaurante italiano en Beverly Hills.
Arcaro murió en 1997. Su cuerpo fue incinerado y sus cenizas fueron enterradas en el columbario del cementerio católico Our Lady of Mercy de Miami. En la actualidad, sigue siendo uno de los jinetes más conocidos de la historia de las carreras de caballos, llamado «el Maestro» por su habilidad para montar, su buen sentido del ritmo y la capacidad de cambiar su látigo de una mano a otra con facilidad durante una carrera.