La sed del país por el agua con gas se refleja en el aumento vertiginoso de las ventas a medida que más estadounidenses abandonan los refrescos y otras bebidas azucaradas. Las ventajas de esta bebida efervescente, sin calorías ni azúcar, están muy claras, si se pregunta a Katie Johnson, dietista titulada y entrenadora de salud y bienestar certificada.
«El agua con gas es absolutamente importante para la hidratación», dice Katie.
La revista American Journal of Clinical Nutrition realizó un estudio en el que se comparaban los efectos hidratantes de diferentes opciones de bebidas, incluida el agua con gas. La investigación no encontró un menor efecto de hidratación con el agua con gas en comparación con el agua sin gas normal.
Ambos tienen el mismo ingrediente base, sin embargo, el agua con gas incluye dióxido de carbono – que es lo que le da su efervescencia. Esas burbujas adicionales no desempeñan necesariamente un papel en su capacidad de hidratación, pero pueden marcar la diferencia en la cantidad que algunas personas pueden consumir sin sentirse demasiado llenas.
Las burbujas pueden causar una acumulación de gas y conducir a la hinchazón y el malestar, pero Katie dijo que en algunos casos, también puede ayudar a la digestión.
Para aquellos que buscan poner un poco de variedad en su consumo regular de agua, los CDC recomiendan beber agua con gas como una alternativa saludable a las bebidas azucaradas y llenas de calorías para ayudar a prevenir la obesidad.
De hecho, Katie dijo que debido a esa sensación de saciedad, usted también consumirá menos, reduciendo así el consumo de calorías adicionales. Dicho esto, también querrá tener en cuenta la hidratación, continuando con el agua, según sea necesario.
«Si la gente está preocupada por reconocer los signos de una hidratación adecuada, les digo que estén atentos a los signos de deshidratación como el dolor de cabeza, la fatiga, el mal humor y la orina oscura. La orina de color claro es una buena señal de que estás donde debes estar», dijo Katie.
Ya sea que busques agua regular sin gas o con gas, la Clínica Mayo describe cómo medir la cantidad de agua que necesitas para mantener tu cuerpo saludable cada día, recomendando a las personas que ajusten su consumo de agua en base a varios factores.
Ejercicio: La Clínica Mayo afirma que si una actividad le hace sudar, debe beber más agua para cubrir la pérdida de líquidos, especialmente antes, durante o después de un entrenamiento.
Medio ambiente: Tenga en cuenta el clima cálido o húmedo. Sudar a altas temperaturas requiere una ingesta adicional de líquidos. La deshidratación también puede producirse a grandes alturas.
Salud general: Si está enfermo, su cuerpo pierde líquidos cuando tiene fiebre, vómitos o diarrea. Beba más agua o siga la recomendación del médico de tomar soluciones de rehidratación oral. Las infecciones de la vejiga y los cálculos del tracto urinario también son afecciones que requieren una mayor ingesta de agua.
Embarazo o lactancia: Las mujeres que están embarazadas o amamantando necesitan líquidos adicionales. Las recomendaciones para las mujeres embarazadas aumentan a 10 vasos de líquidos diarios, y las mujeres que amamantan aún más, con 13 vasos de líquidos cada día.
Sea cual sea la forma en que decida cumplir con su consumo diario de agua, las principales investigaciones le dan permiso para seguir adelante, engullir las bebidas gaseosas y elevar su lata hacia un verano saludable e hidratado.