Abstract
Un biomarcador es una característica que puede medirse y evaluarse objetivamente como indicador de procesos biológicos normales, procesos patógenos o respuestas farmacológicas a una intervención terapéutica. Muchas pruebas de uso común en la práctica clínica pueden servir como biomarcadores. La mayoría han sido identificados sobre la base de la percepción o la fisiología subyacente o los mecanismos biológicos. Con el aumento de los conocimientos y la experiencia práctica, algunas de estas pruebas han evolucionado hasta convertirse en un punto final medible en la investigación clínica, aplicado como indicador de cambio, para bien o para mal. La tradicional identificación de biomarcadores como producto secundario observacional de la práctica clínica se está convirtiendo cada vez más en un proceso industrializado de descubrimiento de biomarcadores, apoyado por paradigmas estandarizados de validación de biomarcadores y traslación de la mesa de trabajo a la cabecera. La utilidad potencial de los biomarcadores en los estudios clínicos, en los que se investigan nuevos tratamientos o nuevas estrategias de gestión clínica, está aprovechando los recientes avances tecnológicos, desde las ciencias moleculares hasta las potentes imágenes, que prometen acelerar el descubrimiento de nuevos tratamientos. En la búsqueda activa de nuevos biomarcadores, se pueden considerar muchos candidatos potenciales, lo que permite muchos fracasos pero unos pocos grandes ganadores. El descubrimiento de biomarcadores es un proceso continuo, en el que la traducción se pone a prueba de novo en cada uno de los estudios, lo que nos brinda la oportunidad de revisar nuestros conocimientos sobre el complejo esquema de la fisiología y la fisiopatología humanas. A la hora de predecir lo que la Naturaleza ha establecido, los avances tecnológicos pueden ser sólo el primer paso. Esta revisión ofrece una introducción al campo del descubrimiento y la traducción de biomarcadores. Trata de la evolución de la nomenclatura, los principios básicos del proceso de validación y, basándose en ejemplos de medicina cardiovascular, su importancia para la aplicación clínica.