2017
Probablemente todos hemos sido culpables en algún momento de poner nuestro chocolate en la nevera. O (jadeo) en el congelador. Sin embargo, esa práctica puede causar estragos en tu reserva de chocolate. ¿Qué puede hacer un amante del chocolate durante el caluroso verano? He aquí algunos consejos profesionales.
Mantenga su reserva magra
Cuanto más fresco sea el chocolate, mejor será su sabor. Esto puede parecer obvio, pero nunca está de más recordarlo. Controle el deseo de acumular chocolate. En realidad, sólo debe comprar el chocolate en las cantidades que vaya a consumir en un corto período de tiempo. Y antes de echar ese chocolate al carro de la compra, tómese un momento para comprobar la fecha de caducidad.
Conozca a los adversarios del chocolate
Conozca a los archienemigos del chocolate: el calor y la humedad. Para proteger la textura, el sabor y la apariencia del chocolate, guárdelo a una temperatura constante de 65 a 68 °F, y a una humedad baja. Las fluctuaciones de temperatura y humedad (como cuando se mete y saca del frigorífico) crean la tormenta perfecta para producir el temido… chocolate bloom.
El chocolate bloom es la acumulación visual de cristales de azúcar en la superficie de la tableta – causada cuando el chocolate está sometido a fluctuaciones de temperatura y/o humedad. Aunque es seguro consumirlo, el bloom afecta negativamente a la apariencia, el sabor y la textura del chocolate.
Aquí hay fotos de los archivos de nuestros clientes, que muestran lo que puede ocurrir cuando el chocolate se somete a condiciones salvajes y locas. Algunos pueden encontrar estas imágenes perturbadoras. Yo, desde luego, sí.
Pero si hay que enfriar…
Lo entiendo. El verano está aquí y hace calor, por dentro y por fuera. Como norma, guardar el chocolate en la nevera o en el congelador es una mala idea. Pero como con cualquier regla, hay excepciones. Si no tiene acceso a un lugar de almacenamiento fresco y con poca humedad, ésta es la mejor manera de enfriar el chocolate…
Antes de meterlo en la nevera, asegúrese de que está bien envuelto para evitar que coja olores o condensación. Y cuando lo saque de la nevera, aísle el chocolate aún envuelto en un paño de cocina para ayudar a que vuelva a la temperatura ambiente lentamente antes de desenvolverlo.
Por supuesto, todo esto es un punto discutible si, como yo, su chocolate no dura en su casa más de un día o dos.