La conciencia interoceptiva es la conciencia de las sensaciones corporales internas, que implica el proceso sensorial de recibir, acceder y valorar las señales corporales internas (Craig, 2009). La conciencia interoceptiva es fundamental para los enfoques basados en la atención plena, ya que implica una conciencia centrada en el momento presente en las sensaciones internas, que suele introducirse atendiendo a las sensaciones de la respiración (inhalación y exhalación), o realizando un escaneo del cuerpo. La interocepción se reconoce como un posible mecanismo subyacente a los enfoques basados en la atención plena (Farb et al., 2015; Garland, 2016), y el aprendizaje de habilidades de conciencia interoceptiva puede mejorar el bienestar y aumentar la capacidad de regulación de las emociones (de Jong, et al., 2016; Price, et al., 2018).
Sin embargo, la atención plena en la experiencia corporal interna no es fácil para todos. Esto tiende a ser particularmente cierto para las personas que no están familiarizadas con la práctica, los que tienen altos niveles de estrés (Schulz y Vogele, 2015), y los que pueden evitar la conciencia de sus sensaciones corporales internas debido al dolor físico o emocional (Farb, et al., 2015). Para algunos, la asistencia individualizada es útil para aprender las habilidades fundamentales de la conciencia interoceptiva, que implican habilidades de atención plena de la presencia, y la observación enfocada de la experiencia corporal interna. La conciencia plena en la terapia orientada al cuerpo (MABT) es uno de estos enfoques. El enfoque MABT surgió del trabajo clínico con personas que buscaban conciencia emocional y curación, pero que estaban desconectadas de sus cuerpos. Los resultados de la investigación ponen de manifiesto lo útil que puede ser el enfoque MABT para aprender habilidades de conciencia interoceptiva, para reducir los síntomas de angustia y para aumentar la regulación de las emociones. Gran parte de esta investigación es con mujeres en recuperación de la dependencia química (la mayoría de las cuales tienen extensas historias de trauma interpersonal) (Price et al., 2018; Price y Smith-DiJulio, 2016; Price et al., 2012), así como con personas que viven con el VIH (Price, et al., 2013), y mujeres en recuperación de abuso sexual infantil (Price, 2005; 2006). Como escribió un participante en la investigación con TEPT co-ocurrente y trastorno por uso de sustancias sobre el aprendizaje de este enfoque (Price y Smith DiJulio, 2016): «Intenté meditar durante años y nunca fui capaz de concentrarme. Con MABT, pude ralentizar mi mente y luego seguir lo que ella (la terapeuta) estaba diciendo, concentrándome en una parte del cuerpo, y lo que estaba sintiendo y después hablando de eso. Con el tiempo, aprendí a hacerlo por mí mismo. Por eso me pareció increíble este enfoque, porque me enseñó a meditar. Ahora medito todas las noches. La diferencia es tener a alguien que me guíe para aprender a hacerlo primero.»
Los terapeutas formados en el enfoque MABT pueden enseñar a los clientes a desarrollar habilidades de conciencia interoceptiva para aumentar la regulación de las emociones (Price y Hooven, 2018). La terapia implica guiar a los clientes a través de un proceso de aprendizaje por etapas que comienza con la identificación y la articulación de las sensaciones físicas (por ejemplo, cómo describir la sensación de un músculo tenso), luego presenta a los clientes ejercicios específicos destinados a aprender a llevar la atención enfocada a las sensaciones y las áreas en el cuerpo interno (por ejemplo, la atención consciente en un espacio interno del cuerpo), y finalmente enseña la atención consciente sostenida en áreas específicas del cuerpo utilizando un proceso de indagación guiada. Este enfoque apoya la exploración interna y, a través de este proceso, los clientes desarrollan herramientas para el autocuidado basadas en su propio viaje de autodescubrimiento.
Actualmente, hay dos estudios de MABT financiados por el NIH. Uno de ellos examina la eficacia de MABT para hombres y mujeres en tratamiento asistido con medicación para el trastorno por consumo de opiáceos. El otro es un estudio piloto de imagen que examina la función interoceptiva (a través de fMRI) como un biomarcador mecanístico subyacente a MABT para hombres y mujeres con estrés elevado.