Las 67 especies de Nicotiana proceden de Australia, América del Norte y América del Sur tropical. Todas tienen flores tubulares o en forma de trompeta que suelen abrirse al atardecer y por la noche, desprendiendo a veces una potente fragancia. Se pueden utilizar como plantas ejemplares o de parterre, en arriates, jardines forestales o contenedores. Las alturas van desde menos de 1 pie hasta más de 10 pies.
Características notablesPlantas atractivas de larga floración con flores en forma de trompeta en tonos verdes, blancos, rojos y pasteles. Algunas especies tienen un atractivo follaje. Bastante fácil de cultivar a partir de semillas. El contacto con el follaje peludo puede irritar la piel.
CuidadosDe pleno sol a media sombra en suelo fértil y húmedo con buen drenaje. Estacar las plantas que no se cultiven en lugares protegidos.
PropagaciónPara conseguir que las Nicotianas florezcan, puede esparcir las semillas a principios de la primavera, pero no conseguirá un gran despliegue hasta agosto. Para obtener una floración más temprana, inicie las minúsculas semillas en el interior de 8 a 10 semanas antes de la fecha de la última helada a 64 °F. Las semillas deben sembrarse en la superficie, ya que necesitan luz para germinar. En unos 10 días, las semillas brotan y pronto forman pequeñas y atractivas rosetas. Las hojas amarillean rápidamente si las plántulas tienen hambre. Aliméntalas con un aporte semanal de emulsión de pescado y abono 20-20-20 hidrosoluble, utilizando cada uno de ellos a la mitad de su potencia. A medida que se acerque la fecha libre de heladas, aclimate gradualmente las plántulas a la vida al aire libre. A principios del verano, las nicotianas iniciadas en el interior deberían estar en flor. Muchas especies se auto-siembran.
ProblemasUna vez en marcha, las plantas no tienen problemas, aunque los áfidos a veces favorecen al tabaco de bosque, y muchas especies son propensas a los ataques de babosas en sitios húmedos y sombreados. También son posibles los virus, la podredumbre del tallo, la podredumbre del tallo, el mildiú velloso, la humedad y la podredumbre de la raíz, así como las orugas, los minadores de las hojas y los ácaros.