La preparación incluye dormir bien por la noche antes de la evaluación y tomar una comida saludable que incluya proteínas antes de llegar a la consulta.
Se le pide que se lave el pelo varias veces con un champú de PH neutro y que no utilice ningún acondicionador ni tratamiento capilar a continuación.
Antes de su evaluación, completará una serie de cuestionarios que le ayudarán a identificar las áreas de su cerebro que más le preocupan.
El día de su evaluación, pasará unas 2 horas en la consulta para que se recojan sus datos. Un EEG rastrea y registra los patrones de las ondas cerebrales. Los electrodos registran los impulsos eléctricos del cerebro y envían las señales a un ordenador que procesa los resultados. Estas ondas cerebrales se registran en tres condiciones: con los ojos abiertos, con los ojos cerrados y durante la tarea (22 minutos).
Se le dan oportunidades para hacer descansos, según sea necesario. La prueba no es invasiva y sólo requiere que se siente en una silla.