Procedimiento
Las resonancias magnéticas suelen durar entre 20 y 90 minutos, según el tipo de estudio que se esté realizando. Debe recostarse en una camilla móvil mientras el técnico lo coloca en la posición correcta.
Para detectar problemas específicos, es posible que su hijo reciba una solución de contraste por vía endovenosa. Esta solución, que no provoca dolor al entrar en las venas, permite resaltar algunas zonas del organismo, como los vasos sanguíneos, para que los médicos vean más detalles en áreas específicas. La solución de contraste que se utiliza en las resonancias magnéticas es segura y las reacciones alérgicas son muy inusuales. Antes de administrar la solución de contraste, el técnico le preguntará si su hijo es alérgico a algún medicamento o alimento.
A medida que se realiza el examen escuchará sonidos repetitivos provenientes de la máquina. Esto es absolutamente normal. Quizá reciba tapones para los oídos a fin de bloquear el ruido. Tendrá un botón para llamar si se siente incómodo durante el examen.
Una vez finalizado el estudio, el técnico le ayudará a bajarse de la camilla.