El realismo es aquella manera el cual se presenta la realidad tal como es. Es decir es cuando el poseedor de esta postura no exagera ni minimiza una situación, sino que la expresa o relata tal cual como es o sucedió sin adornos, o matices. Esta es una palabra que contiene un sin fin de conceptos dependiendo de la rama en la que se presente, por ejemplo: En el campo del arte se conoce como realismo a la estructura estética que busca surgir una imitación fiel de la naturaleza. También se encuentran los realismos pictóricos (el cual plasma la realidad en cuadros) y el realismo literario (el cual los textos intentan aportar un testimonio sobre una determinada época).
El realismo ha tenido expresiones en las más diversas actividades del ser humano, en las artes como anteriormente se mencionó, la literatura, la filosofía o el derecho. Este también es utilizado en la política ya que refiere a la defensa de la monarquía y del poder real como sistema para la administración del estado; así, son realistas quienes muestran favorable al establecimiento, conservación o restauración del poder monárquico.
Para mantener el realismo el individuo o persona debe mantener una postura objetiva sin dejarse influir por los sentimientos o pensamientos distorsivos de lo que sucede. Debe ver las cosas como realmente son. Y no dejarse llevar por engaños o manipulaciones, e incluso el propio engaño de abrir los ojos y ver una realidad que no aceptan. En este tema es de suma importancia el modo práctico de actuar y de pensar: ya que la manera de pensar y actuar de una persona se le denomina como realismo. Existen individuos que por su personalidad y carácter son prácticos, y resuelven las situaciones que se les presentan de manera concreta. Mientras que otras actúan por el contrario con mucha duda, y deben consultar con alguien antes de tomar decisiones porque no tienen el convencimiento de hacerlo bien.