Los pavos tienen la mala fama de no ser muy inteligentes, pero esa reputación no es del todo merecida. Mimi Ditchie Photography/Moment/Getty Images
Los pavos son el pilar del Día de Acción de Gracias en EE.UU. Tal vez sea por su torpeza al andar, las tambaleantes barbas rojas bajo el cuello o los extraños sonidos que emiten, pero los pavos se han ganado la reputación de ser criaturas estúpidas. Algunas personas incluso utilizan la palabra «pavo» para referirse a los ineptos o a los estúpidos.
Quizás la reputación de «pájaro tonto» sea el motivo de la historia que cuenta que, durante una tormenta, los pavos se quedan mirando al cielo con el pico abierto, paralizados, hasta que se ahogan. Aunque los pavos a veces inclinan la cabeza hacia el cielo y permanecen allí durante varios momentos, los científicos dicen que la idea de que los pavos se ahogan de esa manera es sólo un mito.
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Los pavos tienen visión monocular. Sus ojos están situados a cada lado de la cabeza, por lo que pueden mirar dos cosas a la vez, pero ambos ojos no pueden enfocar la misma imagen al mismo tiempo como los ojos humanos. (Aunque esta característica ayuda a los pavos a evitar a posibles depredadores, no les proporciona una visión muy profunda. Los pavos tienden a inclinar la cabeza hacia un lado para ver mejor algo. Si un pavo inclinara la cabeza hacia atrás para mirar la lluvia, probablemente tendría problemas para enfocar las gotas.
Entonces, ¿por qué los pavos miran a veces hacia el cielo? Tom Savage, antiguo profesor de ciencia animal en la Universidad Estatal de Oregón, dijo que la raíz de este comportamiento no es la estupidez, sino los genes. A principios de la década de 1990, descubrió una enfermedad hereditaria en los pavos, denominada espasmos tetánicos del cuello. Esta condición puede hacer que los pavos muestren comportamientos anormales, como mirar al cielo durante 30 segundos o más a la vez.
Los pavos en realidad no son tan tontos como pueden parecer. Se relacionan entre sí y, si hay humanos cerca, se acercan a saludarlos.
Aquí hay algunos datos reales sobre los pavos:
- Los pavos domésticos no pueden volar; pierden sus propiedades aerodinámicas debido a la forma en que son criados para la producción de carne pesada, aunque a veces intentan dar saltos. Los pavos salvajes, sin embargo, pueden volar durante breves periodos de tiempo. Son sorprendentemente rápidos, tanto en tierra como en el aire, y alcanzan velocidades de 40 km/h en tierra y 97 km/h en el aire, dice Scientific American.
- Los pavos se asustan con los ruidos fuertes y, cuando lo hacen, suelen apiñarse a lo largo de una valla.
- Benjamin Franklin era un fanático del pavo, lo llamaba «ave de valor» y lo comparaba favorablemente con el águila calva, de la que decía que era un ave de «mal carácter moral», según el Instituto Franklin.
Publicado originalmente: Sep 24, 2007
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