Thomas Greene Wiggins nació el 25 de mayo de 1849, hijo de Mungo y Charity Wiggins, esclavos en una plantación de Georgia. Era ciego y autista, pero un genio musical con una memoria fenomenal. En 1850, Tom, sus padres y sus dos hermanos fueron vendidos a James Neil Bethune, un abogado y editor de periódicos de Columbus, Georgia. Al joven Tom le fascinaban la música y otros sonidos, y a los cuatro años ya era capaz de interpretar melodías al piano. Debutó en un concierto a los ocho años, actuando en Atlanta.
En 1858 Tom fue contratado como músico-esclavo, a un precio de 15.000 dólares. En 1859, a la edad de 10 años, se convirtió en el primer intérprete afroamericano en tocar en la Casa Blanca cuando dio un concierto ante el presidente James Buchanan. Sus piezas para piano «Oliver Galop» y «Virginia Polka» se publicaron en 1860. Durante la Guerra Civil volvió a estar con su dueño, recaudando fondos para la ayuda a los confederados. En 1863 tocó su propia composición, «Battle of Manassas». En 1865, Tom Wiggins, de 16 años, ahora «contratado» por James Bethune, podía tocar obras difíciles de Bach, Chopin, Liszt, Beethoven y Thalberg. También tocaba piezas tras una sola audición y memorizaba poemas y textos en lenguas extranjeras. La publicidad afirmaba que Tom no había recibido clases, pero en realidad fue tutelado por un profesor de música que viajaba con él.
James Neil Bethune llevó a Tom Wiggins a Europa, donde recogió testimonios de los críticos musicales Ignaz Moscheles y Charles Halle, que se imprimieron en un folleto «The Marvelous Musical Prodigy Blind Tom». Con estos y otros avales, Blind Tom Wiggins se convirtió en un intérprete reconocido internacionalmente. Hacia 1868, Tom y la familia Bethune vivían en una granja de Virginia durante el verano, mientras hacían giras por Estados Unidos y Canadá el resto del año, con una media de 50.000 dólares anuales en ingresos por conciertos. James Bethune acabó perdiendo la custodia de Tom a favor de la ex esposa de su hijo, Eliza Bethune. Charity Wiggins, la madre de Tom, fue parte en el juicio, pero no ganó el control de su hijo ni de sus ingresos.
El ciego Tom Wiggins dio su última actuación en 1905. Murió tres años después, el 13 de junio de 1908, a la edad de 59 años, en la casa de su representante en Hoboken, Nueva Jersey.