Todos hemos oído hablar de nuestra «barrera cutánea protectora» y del «manto ácido». Pero, ¿qué son y por qué son tan importantes para una buena piel?
¡Es hora de abrocharse el cinturón e ir a la escuela de la piel! Te prometemos que es mucho más divertida que la escuela normal.
Piel = barrera protectora de tu cuerpo
Tu piel es la pared de ladrillos que actúa como tu propio protector personal. Las células de tu piel son los ladrillos y los lípidos de la piel son la argamasa.
Cuando está sana y fuerte, esta pared mantiene la humedad para que todos los órganos importantes, como los pulmones y el corazón, sigan funcionando en condiciones óptimas.
La piel también mantiene alejados a los agresores diarios, es decir, los contaminantes, los alérgenos, el polvo, los gases, los rayos UV y los agentes patógenos.
Cuando la pared de ladrillos de la piel presenta grietas, los agresores pueden colarse a través de ella y la piel sana puede volverse rápidamente seca, sensible e irritada. El deterioro de la función de barrera de la piel y la sequedad que conlleva son las principales causas de los incómodos problemas cutáneos como la dermatitis atópica y el eczema.
Mantenimiento ácido = la barrera protectora de tu piel
Acércate un poco al microscopio. El manto ácido es la capa superior de tu piel. Es la primera línea de defensa de la barrera protectora de tu piel.
¿Has oído hablar del pH? Es una forma de medir lo ácida o alcalina que es una sustancia y los valores van de 0 a 14, siendo 0 muy ácido y 14 muy alcalino. El agua es neutra a 7, y un manto ácido saludable es ligeramente ácido a 5,5 (y el jabón convencional es bastante alcalino a un pH de alrededor de 9 a 11).
Tu manto ácido es un pequeño ecosistema equilibrado de microflora compuesto de sebo (aceite) y sudor que mantiene alejados a los virus, bacterias y otros tipos dañinos.
¿Pero por qué necesito saber esto?
Alterar el equilibrio de su manto ácido es algo malo, y por desgracia nuestro manto ácido es un alma inconstante y muy fácil de alterar.
Un manto ácido sano y equilibrado significa una piel suave, tersa y flexible. Pero una piel con un manto ácido desequilibrado es propensa a sufrir muchas afecciones cutáneas como acné, sequedad, irritación y sensibilidad.
Los limpiadores agresivos (incluidos los productos para el cuidado de la piel y los productos de limpieza del hogar), el aire acondicionado, los medicamentos, la calefacción, la contaminación, los rayos UV y los ingredientes alcalinos (incluso la aparentemente inofensiva sosa bicarbonatada y el jabón convencional) pueden hacer que el sistema de protección de su piel se tambalee.
Su manto ácido es probablemente demasiado ácido cuando:
- Rara vez necesitas usar crema hidratante
- Tu piel es reactiva y sensible a los productos
- Tu piel es grasa y propensa a los brotes
- Tu piel se siente a menudo irritada y se ve roja
- Tu piel se ve grasosa
Tu manto ácido es probablemente demasiado alcalino cuando:
- Su piel se siente tirante y seca después de la limpieza
- Necesita aplicarse crema hidratante a lo largo del día
- A veces le aparecen manchas de piel seca o áspera
- Su piel se ve apagada y por por la mañana muestra más líneas de expresión
- Su piel puede picar o irritarse después de aplicarse productos
- Su piel rara vez aparece rellena y con rocío
Si cree que su manto ácido está un poco desajustado, la buena noticia es que puedes ayudar a tu piel a protegerse. Aparte de minimizar todas esas cosas que causan el tambaleo que hemos enumerado antes, puedes darle a tu piel un poco de mimo con hermosos productos naturales que ayudarán a mantener ese manto ácido equilibrado.
Algunos sabios consejos para mantener tu barrera protectora feliz:
- No utilices jabón o tensioactivos fuertes (por ejemplo, SLS/SLES) para limpiar. Esto puede eliminar temporalmente su manto ácido (¡oh no!).
Una forma mejor – ‘Cloud 9’ Deep Cleansing Balm - Usa un tónico para reequilibrar el pH de tu piel después de la limpieza.
Una forma mejor – Tónico Perfeccionador ‘Tickled Pink’ o Tónico Hidratante ‘Raindrops on Roses’ - Hidratar con productos que contengan emolientes (como mantecas y aceites) que dejen una ligera película protectora para ayudar a tu manto ácido a hacer su trabajo.
Una forma mejor – Aceite Activo de Jojoba ‘Laugh Out Loud’, Crema Antioxidante Ligera ‘Perfectly Happy’ o el Aceite Corporal ‘Blissed Out’.