Existen muchas opiniones e ideas sobre el envejecimiento. Las teorías biológicas se han apoderado del imaginario popular y científico como posibles respuestas a una «cura» del envejecimiento. Sin embargo, no está claro qué es exactamente lo que se cura o si el envejecimiento podría clasificarse como una enfermedad. Algunos científicos están convencidos de que el envejecimiento se puede alterar biológicamente y que la duración de la vida humana se puede alargar enormemente. Otros investigadores creen que el envejecimiento es un objetivo escurridizo que sólo puede ser «estadísticamente» manipulable mediante una mejor comprensión de los principios operativos de los sistemas situados en entornos complejos. No sólo hay confusión sobre las definiciones, sino también sobre la seguridad de cualquier intervención potencial. Curar la muerte de las células, por ejemplo, puede conducir a un cáncer celular. La búsqueda de una cura para el envejecimiento no es una empresa claramente beneficiosa. En este artículo se describen, en primer lugar, las ideas actuales sobre los procesos de envejecimiento y, en segundo lugar, se describen varias tecnologías actuales de prolongación de la vida. En tercer lugar, analiza estas teorías y tecnologías, centrándose en dos puntos de vista científicos representativos y diferentes. El documento también considera el dilema de salud pública que surge de la investigación sobre la prolongación de la vida y examina dos cuestiones, la relación riesgo/beneficio y el consentimiento informado, que son clave para desarrollar directrices éticas para las tecnologías de prolongación de la vida.